Yo era muy pequeño, tenía seis años, cuando un día, antes de que anocheciera, se presentó un hombre que yo no había visto nunca. Le dio un dinero a mi padre, me cogió por los brazos y me subió al caballo. Partimos. u003cbru003eu003cbru003eMi padre me había vendido como se vende una cabra. u003cbru003eu003cbru003e