"En el nombre de Dios" o "En el nombre de la nación". Estas dos expresiones han sido reitaeradamente esgrimidas, a lo largo de los tiempos, a la hora de condenar a muerte a una persona. Este libro pretende ser una aproximación histórica a la pena de muerte. como síntesis obligada, recoge la evolución de este castigo desde la antigüedad hasta comienzos del siglo XXI; repasa, asimismo, los crueles métodos que el ser humano ha utilizado para asesinar a otros seres humanos, y se detiene en las manifestaciones que dichos métodos han inspirado en la literatura y el arte. A la vez, destaca las reivindicaciones del abolicionismo, porque se ha demostrado que, lejos de causar los efectos que sus defensores predican, la pena capital denigra a todos los sere humanos. Este supremo castigo sigue vigente en muchos países, en cuya legislación tiene cabida la ejecución de hombres y mujeres que cometan determinados delitos. La pena de muerte no deja de ser un instrumento en manos de quienes apelan a la defensa de la sociedad cuando, en realidad, sólo pretenden mantener sus intereses y privilegios. Por eso les molesta tanto a sus defensores el estudio de la historia, por eso siguen sosteniendo la necesidad de la pena de muerte. Éste es un libro que plantea, con valentía y rigor histórico, las grandes preguntas en torno al asesinato legal de los seres humanos.