El poder, el dinero y el sexo se mezclan en el crisol de una pequeña empresa produciendo una historia llena de matices, en la que algunos personajes se dejan la piel, otros sobreviven con dificultades y, finalmente, unos pocos triunfan e imponen su ley. El resultado es que la nueva empresa va a servir mejor a los intereses de los vencedores, aunque se hayan comprometido su independencia y su viabilidad a largo plazo.