Un extraño tapiz colgado en una sala de museo que no existe revela que Max es el elegido: sus extraordinarias cualidades le hace apto para entrar en la escuela de Rowan, un internado donde nada es lo que parece. Allí descubrirá que Astaroth, el líder de las fuerzas del Mal, no murió cuando fue derrotado en la Edad Media. Sus secuaces andan sueltos y tienen planes para sacarlo de su letargo. Y en los terribles planes trazados para despertar a este ser de las tinieblas entra Max. Entra su sangre. 42 potenciales, alumnos con talentos especiales, han sido ya secuestrados. A Max sólo le quedan dos opciones: morir o convertirse en un héroe